
“LOS HOSPITALES SIEMPRE TIENEN DEUDA”
Dr. Rubén Millán, director del hospital J. M. Gomendio
Ramallo City comenzó el año con una entrevista al Dr. Rubén Millán, director del hospital José M. Gomendio, quien ya tuvo la oportunidad de ocupar ese cargo años atrás. Con él dialogamos sobre el presente y el estado en general del nosocomio.
“Todavía estamos en una etapa de relevamiento y acomodamiento de los sectores del hospital. Se hizo relevamiento del personal y la infraestructura del hospital y algunos problemas de funcionamiento. Una de las primeras medidas, desde el punto de vista edilicio, es poder restablecer la circulación adecuada adentro del hospital ya que, en su momento, con la pandemia, por necesidad, supongo, se debió bloquear y aprovechar un área de tránsito muy importante”, comenzó indicando el doctor. Y agregó: “En la parte de funcionamiento del hospital nos encontramos con algo lamentable como es que no funciona el tomógrafo, un aparato de diagnóstico valioso para el hospital, donado por Siderar, usado, que cumplió su ciclo de disparos y cuando se agota el tubo la única solución es el cambio. Aún no busqué presupuestos porque estamos un poco alejados de poder restablecer rápidamente el tomógrafo. Se calcula que el costo es de 100.000 dólares. Hay otras alternativas viables como obtener el tubo en calidad de préstamo o alquiler con un valor mensual”. Asimismo, el doctor nos habló de otro contratiempo con el que se encontró al tomar la dirección del hospital: “Tuvimos algunos inconvenientes con el engranaje de pagos de los insumos que requiere el hospital. Hemos pagado una cifra muy importante, de varios millones de pesos de deuda para poder restablecer ese mecanismo. Con la ayuda de la municipalidad, el intendente y algunos pagos que recibimos de las obras sociales, pudimos restablecer el engranaje para poder tener los proveedores en funcionamiento. Estamos normalizando los insumos de sueros, antibióticos, analgésicos, antiinflamatorios y corticoides que son remedios de uso cotidiano. Los hospitales siempre tienen deuda, lo grave es cuando tienen el aparato de funcionamiento detenido”.
Parte de los problemas para el financiamiento de un hospital que no recibe fondos ni del Estado provincial ni nacional, son las deudas que con la institución mantienen las obras sociales. En este caso, el Dr. Millán destacó el trabajo realizado por la gestión anterior: “El hospital tiene algunos lugares muy clave que son de recupero en donde se ha hecho un buen trabajo, especialmente en lo que hace al PAMI, se hizo un recupero importante. Hay tres obras sociales que están en cobro judicial, una de ellas es el sindicato de la carne cuya deuda supera los $9.000.000. El hospital no factura directamente a las obras sociales, sino a la Superintendencia. En los privados, como la UOM, la prepaga u obra social no paga y en un tiempo se corta el servicio. Nosotros no lo podemos hacer bajo ningún concepto. Estamos atrapados en un sistema que nos hace vulnerables”.
Otro punto importante que se tocó en la entrevista es el tan cuestionado por la comunidad servicio de guardia pediátrica que tiene el hospital: “Desde hace varios años hay falta en la especialidad de pediatría para guardia. A eso se suma que la provincia de Buenos Aires les ha propuesto la retención del título a cambio de una compensación económica a los profesionales de pediatría, neonatología, clínica y terapia intensiva, que son las especialidades en las que faltan profesionales. Ese profesional que podía trabajar en otro hospital ya no lo puede hacer porque tiene el título bloqueado. Es una forma legal de tener el compromiso de trabajar solamente en la institución en donde tiene el bloqueo del título. Hoy perdimos esos profesionales. Esto se hizo extensivo a los médicos de guardia. No tenemos lugar de donde obtener profesionales para hacer las guardias, excepto aquellos que son antiguos y que han querido seguir con el hospital. También está la competencia de mercado; un médico se aleja 50 km y le pagan $50.000 más, parece un mercado Persa. Y muchos otros han optado por irse al exterior”, señaló Millán como los principales motivos que hacen que las guardias pediátricas sean una complicación para el hospital, repercutiendo directamente en la población ante la necesidad de una urgencia.
Relacionado un poco con esto, le preguntamos al doctor por las quejas que en estos últimos días se conocieron por parte de madres que deben acercarse muy temprano, casi de madrugada, al hospital para conseguir un turno para el control sano de sus hijos. El Dr. Millán fue contundente y a riesgo propio de ofender a más de uno, expresó: “El jueves y viernes de la semana pasada vinieron no menos de 36 mamás con sus chicos, algunas con dos o tres. No solo se firma una planilla, también hay que revisarlos. Son 20, 25 minutos o más la atención. Es una planilla del ANSES para cobrar alguna asignación, supongo. Yo sé que es duro lo que voy a decir, pero esas mamás tuvieron un año para hacer el examen. Si se distribuye en el año, no es necesario estar a las 5 de la mañana en el hospital y tomar el último turno del año. Hay una responsabilidad ciudadana. Tienen que hacerse cargo de su responsabilidad. Todos tenemos que hacer un esfuerzo para que eso que funciona mal, funcione bien”. Y para cerrar, añadió: “Hay que optimizar todo lo que uno tiene al máximo y en función de ello ir aumentando el desarrollo”.